Hola chicos!! ¿Cómo están? Continuaremos con cuentos con engaños....ahora será :
Pedro
Urdemales y el árbol de plata
Acordate que...
Podés leer vos solo o pedirle a alguien que te lea.
También podés escuchar la lectura en el audio que te dejamos
aquí
https://cutt.ly/ctbANga
Después de escucharlo una vez, volvé a hacerlo y tratá de
seguir el texto con la vista.
Como en los cuentos anteriores, podés intercambiar con
alguien en tu casa sobre qué te pareció
este cuento, qué sensaciones te produjo, cómo imaginás a
Pedro Urdemales.
Pedro Urdemales es un personaje de algunos cuentos populares
de la tradición hispánica que pasó a la cultura latinoamericana. Hay muchas
historias de Pedro, en todas ellas usa de sus picardías para sacar provecho.
Pedro Urdemales había engañado a un viajero que pasaba por allí y se había adueñado de
dos monedas de oro.
Se fue al pueblo y cambió sus monedas por moneditas de menor valor: ¡más de cien
moneditas le dieron!, ¡recién acuñadas y tan nuevecitas que brillaban como el sol!
Volvió apurado y se sentó a la sombra de un árbol a la orilla del camino.
Con un clavito le abrió un pequeño agujero a cada una, justo en el centro, y pasándoles una
hebra de hilo, las fue colgando de las ramas de un árbol como si fueran frutas.
Las moneditas relumbraban de tal modo a la luz del sol que daba gusto verlas.
Un caballero que venía por el camino vio desde lejos una cosa que brillaba; picó con sus
espuelas al caballo y se acercó a ver qué era. Se quedó con la boca abierta mirando aquella
maravilla porque nunca había visto árboles que diesen monedas de oro.
Pedro Urdemales estaba sentado en el suelo, apoyado contra el árbol.
El caballero le preguntó:
— Este arbolito, le contestó Pedro, es el Árbol del oro.
— Amigo, véndame un brotecito para plantarlo y le daré cien pesos.
— Mire, patroncito -le dijo Urdemales, ¿para qué lo voy a engañar? Las ramitas de este árbol
no brotan.
— Véndame, entonces, el árbol entero; le daré hasta mil pesos por él.
— Pero, patrón, ¿me ha visto la cara de zonzo? ¿Cómo se figura que por mil pesos le voy a
dar un árbol que en un año solo me produce mucho más que eso?
Entonces el caballero le dijo:
— Cinco mil pesos te daré por él.
— No, patroncito, ¿se imagina usted que por cinco mil pesos le voy a dar esta maravilla? Si
me diera la locura por venderlo, no lo dejaría en menos de diez mil pesos; sí, señor, en diez
mil pesos, ni un peso menos, y esto por ser usted.
Le dio el caballero los diez mil pesos y se fue muy contento con el arbolito. Pero al llegar a su
casa descubrió el engaño, y le dio tanta rabia que de su boca brotaba una maldición detrás
de otra contra el pillo que le había preparado aquella trampa.
Mientras tanto, Pedro Urdemales había vuelto al pueblo dispuesto a derrocharse los diez
mil pesos.
FIN
Al igual que hiciste con los cuentos anteriores, te
proponemos pensar sobre algunas preguntas
que nos ayudan a descubrir cómo funcionan los engaños en
este cuento y compararlos con los
otros leídos. Lee y comparte tus opiniones con un adulto que
te acompañe.
Luego lee estas preguntas y envíame un audio con tus
respuestas y opinión. No necesitas escribirlas en la carpeta.
1. ¿Conocías la historia de Pedro Urdemales y el árbol de
plata? ¿Qué te pareció?
2. Al inicio del cuento, el protagonista crea una planta
bastante rara ¿Por qué creés que la hace?
3. ¿Por qué te parece que Pedro puede engañar al caballero?
¿Cuál era su plan?
Pedro
Urdemales y el árbol de plata.
Relato
tradicional español llegado a América en el siglo XVII.
Se adaptó a
personajes pícaros del campo argentino así como de Chile y Perú.
Leo, comparto la lectura y/o escucho el cuento.
Oralmente expreso lo que comprendí .