Después de una semana de mucho trabajo, reuniones virtuales, capacitaciones, redacciones de informes y mucha reflexión sobre nuestras prácticas, el personal docente y el equipo directivo de la EP 39 les da la bienvenida y les desea un excelente comienzo del segundo trimestre de este 2020 tan especial. Un año lleno de emociones encontradas, de esperanzas y decepciones, de incertidumbres y certezas, de cambios y de nostalgia.
Este tiempo tan especial que estamos viviendo nos lleva a la reflexión, nos alienta a la introspección, nos descubre tal como somos, nos individualiza y a su vez nos muestra la importancia del otro en nuestras vidas. Es paradójico que en época de aislamiento y distancias pareciera que nos conocemos mejor, a nosotros mismos y a los otros. Claro que la mejor manera de conocernos es vernos reflejados en el otro. Ese otro que virtualmente pone una mano en nuestro hombro y nos dice “Todo pasa, ésto también pasará”. Pero también en aquel que necesita de nuestra comprensión y nuestra palabra.
Esta “extraña cotidianidad” nos lleva a reflexionar sobre la escuela, nuestra escuela. Esta escuela, tan diferente de la que conocíamos. Esta escuela “de crisis” que despierta nuestra creatividad y nos pone a prueba. Esta escuela “de pandemia” que siempre está: con conexión o sin conexión, repartiendo alimentos o cuadernillos, armando redes y quitando obstáculos. Esta escuela “de cocina”, que se mete en nuestras casas y llena las mesas de libros, hojas y lápices. Esta escuela mediada por las tecnologías, que ahora reúne a la familia alrededor de un celular, acercándonos, generando el contacto y construyendo el conocimiento. Es una escuela del uno a uno, centrada como nunca antes en el alumno y su familia. Esta escuela que no depende del lugar pero sí de las personas que la componen. Esta escuela que es fuerte y resiste, pero que necesita de la voz amiga de aquellos que siempre están dispuestos con un “Seño, qué necesita?”.
Volvemos con energía renovada, con mucho para dar y con la convicción que el “equipo de la 39” no baja los brazos. Sigue adelante y no deja a nadie atrás. No tengas miedo, si te caés, estamos acá, para ayudarte a ponerte de pie nuevamente. Contá con nosotros.